¿Qué es el linfedema?
Existe una idea preconcebida de que la fisioterapia solamente sirve para tratar lesiones. Sin embargo, la fisioterapia es una opción curativa y paliativa, pero también preventiva. En el caso de linfedema, uno de los efectos secundarios del cáncer de mama, la fisioterapia permite evitar este problema o combatir sus consecuencias, ya que una vez que aparece tiende a cronificarse mermando la calidad de vida del paciente.
El linfedema es la inflamación de alguna de las extremidades debido a un exceso de líquido intercelular entre la piel y el plano muscular, debido a un bloqueo en el drenaje normal del cuerpo. Se estima que más del 25% de los casos de cáncer de mama padecen esta complicación como resultado de la aplicación de radioterapia o tras la extirpación de ganglios linfáticos. Si bien esta no es la única causa, puede estar relacionado con una infección e incluso tener origen hereditario, o deberse a alguna enfermedad cardíaca, renal o de hígado. Además de la hinchazón, puede suponer sensibilidad en la piel, dolor en las articulaciones o incapacidad de movimiento, infecciones en las extremidades o debilidad en los miembros afectados.
El trabajo de los fisioterapeutas en el tratamiento preventivo y paliativo del linfedema es un buen ejemplo de que la fisioterapia mejora la calidad de vida y favorecer que el paciente pueda llevar una vida lo más normal posible.
Tratar el linfedema con ayuda de la fisioterapia
Todo tratamiento de fisioterapia es más efectivo con la colaboración activa del paciente. Pero en el caso del linfedema, que puede ir acompañado de problemas de autoestima, por lo que la colaboración y la empatía fisioterapeuta-paciente debe ser todavía mayor.
Actualmente existen diversas técnicas de fisioterapia para su tratamiento. Entre ellas destacan el drenaje linfático manual (DLM), la presoterapia o el vendaje neuromuscular. Cualquiera de estas técnicas se acompaña de ejercicios terapéuticos como las elevaciones de brazos, flexo-extensión de muñeca y codos, movilización de los dedos, pronación-supinación...
Es importante que el tratamiento sea realizado por un fisioterapeuta colegiado, experto en el tratamiento del linfedema. En Clínica Teknos, en Ourense, contamos con una Unidad de Fisioterapia con personal especializado en fisioterapia cardiovascular, por lo que podremos ayudarte eficazmente en tu problema.