La cefalea tensional es una patología con una elevada prevalencia en la actualidad. Constituye el segundo motivo de consulta médica más frecuente, tras el tras el dolor de espalda. Existen investigaciones científicas que concluyen que el 40 por ciento de los adolescentes sufren dolores de cabeza, cuyo porcentaje se incrementa hasta el 80 por ciento en los adultos. De todo ellos, el 70 por ciento resaltan que sus dolores de cabeza están asociadas a dolor cervical.
Existen varios tipos de dolor de cabeza, categorizándose en cefaleas primarias y cefaleas secundarias. La cefalea tensional es una cefalea primaria, y es la más recurrente en las consultas médicas y en las consultas de fisioterapia.
La cefalea tensional es el dolor de cabeza asociado al síndrome de dolor miofascial provocado por los puntos gatillo miofasciales de algunos músculos craneocervicales y craneomandibulares. El punto gatillo es un nódulo hipersensible a la palpación que se encuentra en la banda tensa del músculo somático. Dicho punto gatillo puede provocar dolor de tipo referido a distancia, además de provocar cefalea y otros síntomas como mareo, náusea, inestabilidad, falta de concentración o irritabilidad.
Los puntos gatillo miofasciales son disgnosticados por los fisioterapeutas tocando el músculo de una forma sencilla y precisa. El objetivo es reproducir el dolor para, posteriormente, tratarlo. Una vez detectados los puntos gatillo, el fisioterapeuta establece un plan de tratamiento. Frente a las cefaléas tensionales pueden aplicarse diferentes técnicas; si bien es necesario establecer cuáles son las más indicadas para cada caso concreto.
Tanto la evidencia científica, como la experiencia de la Unidad de Fisioterapia de Clínica Teknos en Ourense, han demostrado que las sesiones de fisioterapia y el ejercicio físico terapéutico, son una solución eficaz contra las cefaléas tensionales.