La crema de protección solar debe ser nuestro acompañante diario, todo el año, pero especialmente durante los días de verano cuando vamos a la playa o a la piscina. Aún estando concienciados de la importancia de la protección solar es muy frecuente olvidarse de usarla en los pies y ésto son tan importantes como el resto del cuerpo y se ven igualmente afectados por los efectos negativos del sol.
Los pies, la parte del cuerpo más olvidada a la hora de ponernos protección solar
La piel de los pies es especialmente sensible, la piel de los pies no está acostumbrada a la exposición de los rayos solares, ya que, salvo en verano, los pies pasan todo el día encerrados en unos zapatos o zapatillas. Por ello, si un día les sometemos a una jornada de sol sin aplicar crema, el resultado será una intensa quemadura solar con todos los peligros que ello lleva asociados.
¿Cómo proteger los pies de las quemaduras solares?
- Es recomendable el uso de cremas con protección solar con factores altos de protección, porque la piel de los pies no está acostumbrada a la exposición solar como indicábamos anteriormente.
- Es importante aplicar la crema solar en los momentos adecuados. Lo ideal es aplicarla antes de salir de casa, unos 30 minutos antes de la exposición solar. Una vez aplicada, no se debe cubrir los pies con calzado o calcetines, ya que se perderá toda la crema con el roce. Hay que esperar a que se absorba bien. Es importante repetir la aplicación cada dos horas.
- No debemos olvidar la planta de los pies.
Signos de quemadura solar en los pies
- Enrojecimiento de la zona.
- Piel caliente al tacto.
- Quemazón y sensibilidad.
- Irritación
- Hinchazón.
- Aparición de ampollas.
Una vez que la prevención no ha sido posible y nos hemos quemado sigue estos consejos:
1. Extrema la hidratación. Hidratar los pies hará que la piel quemada se regenere mucho más rápido. Lo ideal es utilizar una crema específica para este tipo de quemaduras solares. Habrá que aplicarla varias veces al día en la zona quemada, dejando un exceso de crema para que la propia piel del pie vaya absorbiéndola.
2. Evita volver a ponerte al sol.
3. Si la quemadura es muy intensa lo recomendable es visitar al podólogo, especialmente importante si aparecen ampollas.